Emprender no tiene límite edad, pero mejor con un soporte económico
MICROEMPRESARIOS:
Carmen Helena Galindo, 77 años
Haider León Galindo, 44 años
LUGAR: Vereda Doima (La Mesa, Cundinamarca)
Carmen Helena Galindo emprendió a sus setenta y tantos años. En 2019 decidió poner un galpón con el apoyo de su hijo, Haider. Para él esto es “un sueño de ambos hecho realidad”. El sueño implicó iniciar en el mundo financiero a doña Carmen Helena, para luego construir un galpón para 200 gallinas.
Haider tiene un título en Gestión de Administración de Salud en el Trabajo, y ha laborado en granjas avícolas lo que le ha permitido complementar sus conocimientos con el oficio que se desarrolla en la unidad productiva. Su mamá se encarga de la producción y él de la comercialización. Son una gran equipo.
Esta organización ha permitido que la granja ingrese a programas de inclusión financiera y poder así mejorar la productividad de su unidad de negocios.
Con este galpón producen huevos A, AA y AAA y tienen contratos de distribución al detal y para tiendas. Pueden vender más de 300 cubetas mensuales de huevo, su valor oscila dependiendo la calidad de los huevos y la variación de sus costos de producción. Adicionalmente, cuando “las gallinas están listas” las venden en pie para consumir o despresadas.
La asesoría financiera la han recibido de Contactar, con quienes han trabajado muy de la mano e incluso fueron presentados como experiencia exitosa de microempresa frente al reciente Congreso de Asomicrofinanzas, que tuvo lugar en Bogotá.
Para hacer realidad esa inclusión financiera, recibieron una visita, con cuyo asesor recorrieron las instalaciones de la finca y tras el análisis del negocio les dijeron que eran clientes viables para un crédito, para hacer realidad el sueño de doña Carmen de dejarle a su hijo un invaluable legado: el conocimiento sobre el negocio avícola., quedando demostrado con ello que emprender no tiene límite de edad, pero es una realidad si se tiene un soporte económico.